domingo, 17 de enero de 2010

El Barranco del Tuerto


Detuvo el coche acuciada por la necesidad urgente de orinar. Eran los nervios, solía pasarle con frecuencia. Maldijo en voz alta, parar en mitad de la carretera con el vestido de fiesta y los zapatos de tacón no era precisamente lo que tenía planeado. Se adentró un poco entre la vegetación, abajo se oía el murmullo del arroyo que discurría por el Barranco del Tuerto, miró y vio un destello plateado. Fijó la vista y descubrió un coche. Un escalofrío recorrió su espalda, quizás se tratara de un accidente. Debería llamar a la policía, a urgencias… No, eso la retrasaría mucho. Quizás el automóvil llevaba allí un montón de días y a ella le supondría un engorro, llegaría tarde a la boda de su hermana. Subió al coche y aceleró, tratando de dejar atrás los remordimientos, pero estos se habían impregnado en su piel, como un perfume molesto.

Llegó a la iglesia a la hora justa, un extraño revuelo agitaba a los invitados, el silencio se hizo a su llegada. Se miró, quizás se había manchado el vestido cuando paró. De pronto alguien se acercó para abrazarla, sus palabras le quemaron como estuvieran fabricadas con brasas ardientes. “Tu hermana y tus padres, han tenido un accidente, acaban de llamar, los han encontrado, muertos…, en el Barranco del Tuerto…”

13 comentarios:

Mar Cano Montil dijo...

¡Glub, Felisa, se me ha hecho un nudo en la garganta... la noticia se me ha clavado en el corazón como saeta incandescente y me ha quemado como a tu protagonista!

Muy bueno.

Un besote y feliz semana... espero que tu hermana esté recuperándose viento en popa...

Mercedes Pinto dijo...

Un relato escalofriante y desgarrador. A veces, las prisas o la desidia nos hacen olvidar que aquel que nos necesita y estamos abandonando podría ser alguien querido. En este caso lo era, literalmente.
Muy bueno, lo disfruté.
Saludos.

Maribel Romero dijo...

Huy, Felisa, qué estremecedor ese final. Da un vuelco el corazón.
Abrazos.

VivisPato dijo...

Que fuerte! a de ser algo de verdad no envidiable, pero creo que es posible que suceda en este mundo de egoismo...
Saludos.

Ardilla Roja dijo...

Haciendo una broma macabra se puede decir que a los del coche azul los había mirado el tuerto ;)

Muy bueno. Dices muchas cosas con este micro, Felisa.

Feliz semana. Un abrazo.

milagros dijo...

Me encanta este micro. Pocas palabras y mucho significado.
Un abrazo

Annick dijo...

Que realismo!
Me pasan por la mente miles de imagenes .

Muy bueno .

Besos desde Málaga.

CARMEN ANDÚJAR dijo...

Es fuerte. A veces no queremos implicarnos en las cosas por miedo y por no poder digerir los problemas.
Muy buen relato

Susana dijo...

Estremece este micro, Felisa. Enhorabuena, porque, de eso se trata: de hacer sentir con las letras.

Un besote

María José Moreno dijo...

Felisa, me he quedado de priedra, mira que pense que podia ser algo asi y pense en el novio, nunca imagine que fuera sus familia.
Me has sorprendido.
Muy bueno
Besitos lluviosos

Paco Gómez Escribano dijo...

Brillante, Felisa, muy psicológico. He disfrutado mucho leyéndolo. Un beso.

Carlos González dijo...

La idea es genial para componer el micro que te ha quedado estupendo. Pero creo que se podría mejorar, para que fuera más impactante. Te doy mi idea, si me permites. El relato ganaría fuerza si la boda fuera horas más tarde. Y si la policía avisara de que los habían encontrado muertos pero que si los hubieran encontrado antes, se habrían salvado. ¿Qué opinas?
Un beso.

Anónimo dijo...

tu imaginacion y creatividad son geniales, (de genialidad) , tu relato me deja sin palabras, para definir los sentimientos que han provocado en mi.