lunes, 30 de noviembre de 2009

Cazametáforas: La cama


Hoy os quiero hablar de un concurso de radio especial, no tiene un premio millonario, pero es divertido. Se trata de hacer metáforas con la palabra que se propone cada semana. El programa se llama El Público, en Canal Sur Radio y se emite todas las tardes de lunes a viernes. Los martes de 17,00 a 18,00 horas, hay una sección denominada "Poesía lo serás tú" que realiza la poeta Carmen Camacho, paisana y amiga. Y es en este apartado donde se eligen las mejores metáforas envíadas.

Os propongo que mañana martes envíeis vuestras metáforas sobre "la cama", ese mueble tan singular y socorrido, a esta dirección de correo cazametaforas@rtva.es. Para los que no residís en Andalucía, el programa se emite también a través de internet en esta página Canal Sur Radio.


Si alguien quiere también puede dejarla por aquí, en forma de comentario, no hay problema en que estén publicadas previamente. A ver, voy a mojarme un poco, perdonad el atrevimiento.

La cama:

- Un barco que despliega sus velas para los amantes.

- Si no hubiera que hacerla, sería el mueble perfecto.

- Un monstruo con faldas que te come por las noches y te escupe por las mañanas.
Ya tenemos algunas metáforas :
Incongruente: La cama es un campo de juego donde contienden dos equipos pero siempre gana el mismo.
Ardilla Roja: Velero de sueños sobre cuatro patas.
Juan Ballester: La cama: mágico corcel que cada noche iguala a pobres y ricos; bálsamo que cura las cicatrices que el tiempo pone sobre nuestros calendarios.
La cama: atlas en el que cada lámina es una noche llena de aventuras, una página en blanco que escribimos con la tinta invisible de nuestros sueños
¿Quién da más? Por favor, no olvidéis enviarlas al correo que indico anteriormente.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Narices


No es un problema tener la nariz tan grande, no. Es una seña familiar, que refrenda mi noble estirpe. Mi hija también la tiene y no se avergüenza de ella. Hubo un tiempo que sí, que trató de convertirla en una naricita “barbi”. Eso pasó, gracias a Dios que iluminó su camino y a Gerardo, su marido, que cayó en sus brazos presa del hechizo de su apéndice y de mi dinero, claro. No puse problema a su noviazgo con la condición de que la convenciera de no operarse.

Como veis no tengo complejos, la dificultad no radica en esta nariz desproporcionada, en esta ala delta pegada a mi rostro pellejudo. El problema es que se trata de un apéndice viejo sobre una cara desgastada. Y ella es tan joven,… tan hermosa, con esa voz dulce repleta de matices de ron añejo y esa sonrisa de nácar. Hoy me besó, antes de coger la silla de ruedas y empujarla. Creo que es dominicana y que mi hija le paga bien para que me limpie las babas.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Entre amigos y planes estratégicos


No suelo hablar en el blog de mi trabajo, me refiero al que me da de comer, pues si tuviera que vivir con mis ingresos literarios pasaría bastante hambre, pero esta vez si quiero comentar algo. Ayer participé como ponente en unas jornadas sobre planificación estratégica municipal (iba a contar nuestra experiencia como municipio pequeño que está ejecutando un plan estratégico territorial). Los asistentes eran políticos y técnicos de diversos países latinoamericanos y me sorprendieron por varios motivos. En primer lugar, las ganas enormes de aprender, de empaparse de todas las políticas y programas que se están llevando a cabo en los municipios españoles en planificación y desarrollo. Nos cosieron a preguntas a los tres ponentes que compartíamos la mesa redonda, así da gusto.


Luego, en los descansos y durante la comida pudimos hablar más distendidamente, entretejiendo bromas y risas con las cosas serias, dejando traslucir cada uno sus orígenes pero manteniendo algo en común, el idioma. En mi mesa había dos peruanos, dos ecuatorianos, un venezolano y tres españolas, hablamos de comidas, de bailes, de las telenovelas e incluso de los programas infantiles que nos han sido comunes a pesar de la distancia, por ejemplo, Barrio Sésamo, aunque allí Epi y Blas se llamaban Beto y Enrique. O El equipo A que por esas tierras se denominaba Los magníficos.

Otro tema que debatimos fue la forma de expresarnos, ellos bastante más formales y educados, nosotros, los españoles un tanto bruscos, esto dio para un buen rato de conversación, y de risas.

Los sentí muy cercanos y me dio pena no tener más tiempo para conocer un poquito más al resto de participantes, que estaban en otras mesas. Les deseo desde aquí un feliz regreso a su país y espero que les sirva algo de lo que le hemos contado. Ilusión y ganas no les faltan.

martes, 24 de noviembre de 2009

V Certamen Poemas sin Rostro, Canal Literatura


Ya quedan pocos días para participar en este certamen, el plazo se cierra el 1 de diciembre. En un principio pensé en no envíar nada, la poesía no es mi fuerte, finalmente ha surgido un poemilla por ahí y creo que lo voy a presentar, ¿quién más se anima?
Para más información y acceso a la lectura de los poemas presentados pincha sobre la imagen.
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BASES
1. Podrá participar en este certamen cualquier autor mayor de edad que lo desee, con una sola obra, escrita en español.
2. El tema es libre.
3. Los trabajos presentados deberán ser originales e inéditos (incluido Internet) y no premiados ni pendientes de fallos en otros concursos. Cualquier comprobación en este sentido será motivo de descalificación automática.
4. La extensión de los poemas tendrá un límite entre 10 versos mínimo y 60 máximo.
5. Las obras deberán ser remitidas en soporte informático . En un correo electrónico que incluirá los siguientes documentos adjuntos debidamente cumplimentados con una imagen del documento de identidad acreditativo, a la dirección: certamen@canal-literatura.com
Puedes descargarlos pinchando en los tres enlaces siguientes:
a)- Formulario Datos del Autor-PLICA
b)- Declaración del autor
c)- Versos del poema incluyendo título y seudónimo.
6. El plazo de recepción de originales finalizará el 1 de diciembre de 2009
7. Se otorgarán tres premios que consistirán (de momento) en:
• Primer premio: 200 euros, trofeo
• Segundo premio: 100 euros, trofeo
• Tercer premio: 50 euros, trofeo
• Premio especial del publico: Trofeo y la dotación de este premio que será la aportación de los usuarios del Canal Literatura, durante la celebración del certamen.
Todos los poemas finalistas y ganadores pasarán a formar parte de la sección en la Web: “Poemas sin Rostro” en texto y audio.
8. La propiedad de las obras será de los autores aunque la Asociación Canal literatura se reserva el derecho de la primera publicación de las mismas en su Web durante y después del certamen indefinidamente y la primera publicación impresa en el segundo volumen de “Poemas en el Canal” en caso de decidirse su publicación y contar con los medios económicos que la posibiliten.
9. Los premios de este certamen no podrán declararse desiertos.
10. El fallo del Jurado, que resolverá a su criterio las dudas que pueda plantear la interpretación de estas Bases o cualquier incidencia que pueda surgir durante el desarrollo del certamen, será inapelable y se hará público en la web del canal literatura.
11. Si algún participante utilizara un seudónimo que pudiera ser reconocido o crear algún tipo de confusión con los nick (alias) usados habitualmente en el canal literatura, será informado vía correo electrónico de esta circunstancia, para que proceda al cambio del mismo. En último caso, se le asignaría un seudónimo alfanumérico aleatorio que garantizara su total anonimato para todos los ámbitos del certamen.
La participación en el concurso implica la íntegra aceptación de las presentes Bases.
Recomendamos acceder a la web especial del premio para estar informado correctamente y descargar los formularios originales para poder participar en: http://www.canal-literatura.com/Apoesia5
12. Los poemas que no figuren es esta web trascurrido el plazo de una semana desde su envío, es que no han sido admitidos a concurso.
13. La votación del público se hará, una vez finalizado el plazo de presentación en esta web y por el sistema de estrellas que aparecerán debajo de cada poema. El proceso y las normas de votación se anunciará una vez finalizado el plazo de entrega de originales.
• Queremos resaltar desde ahora que todas las votaciones efectuadas consideradas fraudulentas serán borradas.Todas las votaciones duplicadas que se compruebe que proceden de una misma IP serán borradas. Advertimos como cada año que no se dará ninguna explicación sobre estas decisiones técnicas.
• Las aportaciones de los usuarios a estos premios pueden hacerse por transferencia a la cuenta de la Asociación Canal Literatura indicando:
Aportación Premio del Publico, indicando el nombre o NIck.
Nº de cuenta 2043 0143 46 0200004600
Podéis ver las aportaciones en el apartado siguiente:Aportaciones al Premio Especial del Publico

lunes, 23 de noviembre de 2009

Hoy es un regalo, por eso se le llama presente


Esta mañana escuchaba en la radio un programa que hablaba sobre las preocupaciones, esos pensamientos negativos que nos asaltan cada día y que si no contralamos pueden llevarnos a la infelicidad o incluso a la depresión. En una de las llamadas una señora recomendó un libro, según ella le había ayudado mucho a superar sus problemas. Hoy, mientras reviso los blogs me doy de bruces con ese mismo libro, citado en la página del Club de Lectura de Adultos Zaide, el libro se llama Los 10 secretos de la abundante felicidad, de Adam J. Jackson.
No soy muy dada a comprar libros de autoayuda, es más, los rehuyo, entonces ¿por qué hablo de éste en concreto? Sólo por una frase que he visto en el blog del Club de Lectura Zaide que me ha parecido preciosa, la que encabeza esta entrada: "Hoy es un regalo, por eso se le llama presente".
Me quedo con mi presente, quiero disfrutarlo.
(Quién sabe, quizás me pase por la biblioteca a ver si me prestan este libro, ya os contaré)

domingo, 22 de noviembre de 2009

Al atardecer



Al atardecer, cuando el sol abrasa el horizonte, la niña camina despacio hasta la fuente. Con gesto cansado llena la vasija, en los labios se le ha muerto una canción de cuna, apenas tiene siete años. Sin resuello llega a la choza, vacía el contenido del recipiente en un tonel y espera unos minutos para recuperar el aliento y reemprender el inexorable camino.

Al atardecer, cuando el sol juega al escondite con los edificios, la niña abre la nevera, saca un zumo multivitamínico y conecta la video consola, olvida las tibias protestas de su madre recordándole que tiene que hacer los deberes y se dedica por completo a destruir marcianos.

Al atardecer, al atardecer… ¿Quién dijo que todos los atardeceres eran iguales?

viernes, 20 de noviembre de 2009

Hacerse el muerto


Esto de estar con gripe tiene sus inconvenientes, esta tarde me he perdido un taller de escritura que se celebra en mi pueblo. No es cuestión de ir repartiendo virus a diestro y siniestro, así que aquí estoy, en casita, repasando mi novela, organizando archivos en el ordenador... Por cierto, me encontré por ahí perdido este microrrelato, a ver que os parece.

HACERSE EL MUERTO

Me gusta hacerme el muerto. Cruzar los brazos sobre el pecho y poner una pierna sobre otra, quedarme quieto, inmóvil. Acompasar los latidos de mi corazón a una respiración lenta y tenue. Imagino lo que harían los dos si me descubrieran en este preciso instante, cesarían en la pelea, en los gritos. Me mirarían atónitos y pensarían, ya está, se ha muerto el viejo. Ella dejaría escapar una lágrima hipócrita, él me acercaría un espejo a la boca para asegurarse de que mis pulmones ya no respiran, mi sobrino siempre ha sido muy práctico. Después organizarían el entierro, el más barato, un ataúd de pino y una corona de margaritas blancas, he visto la oferta en la funeraria. Me gusta pasarme por allí de vez en cuando y mirar el precio de los funerales de saldo. Pero lo que más me gusta, con lo que más disfruto, es cuando imagino sus caras de comadrejas leyendo el testamento, no saben que he cambiado el que firmé delante de ellos, donde les cedía todos mis bienes a cambio de que me cuidaran el resto de mi vida. De eso hace más de veinte años y todavía, a pesar de mi postura, no me he muerto…, ni tengo intención de hacerlo.

jueves, 19 de noviembre de 2009

¿Gripe A?


(Ilustración de Ainara García, puedes ver más trabajos suyos en: http://ainaragm.carbonmade.com/)

Ayer me levanté fatal, dolor de cabeza, en el pecho, tos y un poco de fiebre. Me fui por urgencias y me recomendaron quedarme en casa a ver la evolución, en el informe ponía " Cuadro sospechoso de gripe A". Después de tanto hablar de esta "pandemia" lo cierto es que preocupa un poco eso de que la sospecha se cierna sobre una misma.

Hoy mi médico de cabecera me ha dado la baja, paracetamol y jarabe para la tos como única medicación. El paracetamol ha conseguido que pueda levantar la cabeza y escribir estas palabras, cuando se pase el efecto acabaré de nuevo tirada en el sofá o en la cama, que son los lugares más recurrentes para pasar una gripe.

Me queda por delante una semana sin salir de casa, por si acaso es gripe A , para curarme y para no ir contagiando a la gente. El problema radica en mis hijos, que no entienden muy bien porqué no pueden besar a mamá, ni acercarse demasiado a ella, es dificil mantener las distancias en tan pocos metros cuadrados.

En fin, a vosotros no puedo contagiaros, así que me daré una vuelta por aquí de vez en cuando (si mi amigo "dolor de cabeza" me lo permite).

martes, 17 de noviembre de 2009

¿Soy yo?


Hoy, mientras contestaba un correo se me ha venido a la cabeza una reflexión. ¿Cuándo escribo en este blog soy realmente yo o un personaje inventado por mí al efecto? No estoy segura. Cuando preparo mis entradas, incluso las más personales, procuro darles un toque literario, no sé si siempre lo consigo, pero al menos esa es mi intención, convertir en literatura retazos de mi existencia. Y esa Felisa que habla, la “escritora” no siempre se parece a la que se levanta a las seis y media cada mañana para ir a trabajar, más bien parece un personaje inventado, confeccionado a golpe de tecla.

Supongo que nadie se muestra tal como es, no de forma completa al menos, las relaciones sociales serían muy complicadas si fuera así. Nunca decimos la verdad a secas, siempre matizamos, nos adaptamos a la situación y actuamos según ella. En este medio las verdades son más a medias que en ningún otro. Cuento lo que quiero sobre mí, y tú, lector que no me conoces, imaginarás una Felisa distinta a la real, tendrás el personaje que yo he creado para mi blog, el que habla por mí, quizás por eso no me cuesta contar cosas personales, en realidad, no las estoy contando yo.

Entonces, ¿he vencido mi timidez? No, simplemente la he ocultado tras ese personaje “Felisa escritora” que es capaz de soportar que la gente lea sus relatos, sus novelas, sus historias personales... Y supongo que cuando consiga que el desdoblamiento sea perfecto, entonces podré escribir todo lo que quiera, sin ningún tipo de trabas, ni reparos. Creo que aún me falta mucho para llegar hasta ahí, para terminar de derribar todas las barreras, en ello estoy.
Por cierto, la de la foto sí soy yo, en un parque de Londres, creo que era Hyde Park.

lunes, 16 de noviembre de 2009

La venganza de Evaristo Cubista de Antonio Zamora

Alejandro Castello, un estudiante encumbrado en su orgullo de clase acomodada, recibe la llamada telefónica de Evaristo Cubillo —un joven inteligente de físico desproporcionado de quien hacía muchos meses que no sabía nada— para invitarlo a cenar y presentarle a su nuevo amor.

Alejandro se sorprende mucho por la invitación, pues, aunque se conocen desde el instituto, un año atrás compitieron por el amor de Julia, una compañera a la que todos los alumnos de la facultad deseaban por su belleza y simpatía. La partida la ganó Alejandro, dejando a Evaristo frustrado y herido en su autoestima. Ahí se inicia la trama de una venganza matemática y lógica, aderezada con una fuerte dosis de realidad, que el lector no tarda en intuir pero que no logrará materializar ni siquiera imaginar hasta el final del libro de manera sorprendente.

Y así es, el final resulta tan sorprendente que consigue revalorizar una historia ya buena de por sí. Esta novela corta se lee de un tirón y cuando la terminas tardas un buen rato en desengancharte de ella, se ha quedado prendida a ti, como la venganza de ese Evaristo Cubillo que sus compañeros rebautizaron como Cubista, por su físico lleno de aristas y desproporciones. La prosa es sencilla y correcta, se podría decir que está al servicio de la historia, la verdadera protagonista.

En fin, un libro que recomiendo porque me resulta dificil, después de tantas lecturas, encontrar algo que consiga sorprenderme sin sentirme engañada, sin pensar que el autor ha intentado tomarme el pelo con un final sacado de la manga. Desde aquí quiero dar mi enhorabuena a Antonio Zamora, que tiene por delante una prometedora carrera como escritor.
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Antonio Zamora nació en Los Corrales (Sevilla) en 1961. Es fotógrafo vocacional y profesional desde hace más de veinte años. Ha publicado los libros Imágenes del mundo (1997), compartido con destacados fotógrafos y escritores de ámbito internacional y Sierra Sur (2001) y ha colaborado con artículos y publicado porfolios en revistas especializadas del medio fotográfico de España, además de llevar adelante numerosas exposiciones.
Como escritor, publicó en 2004 La Puerta, una novela corta que reflexiona lúcidamente sobre la literatura en general. Lector infatigable, ha escrito varias novelas y se consolida como autor de futuro con La venganza de Evaristo Cubista, que se publica ahora en el catálogo de narrativa de la Editorial Hipálage.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

¿Os he hablado ya de Irène Némirovsky?


Némirovsky es una escritora nacida en Rusia, pero que vivió la mayor parte de su vida en Francia, donde publicó su obra; hasta su muerte en un campo de concentración nazi. Su obra más conocida es Suite Francesa, una novela inacabada y publicada muchos años después de su muerte.

La descubrí hace un par de años y desde entonces compro todas las novelas que encuentro de ella publicadas en español, que no son muchas. Es una escritora que logra atraparme por la forma en que dibuja los personajes, la fuerza, la intensidad que pone en ellos. Cuando leo algo suyo siento envidia, ya me gustaría escribir a mí así, pienso. Mi admiración es tal que incluso le puse a uno de mis relatos el título de un libro suyo El ardor en la sangre, que está publicado en este blog:
http://felisamorenoortega.blogspot.com/2008/08/1-premio-certamen-mujeres-creadoras-del.html
Cuando terminé de leer Suite Francesa sentí una rabia negra, de esas que te nublan la vista y te carcomen el alma, odié a los nazis por haberme arrebatado a Iréne antes de terminar su obra más ambiciosa, por haber acabado con la vida de una escritora magnífica, tan solo por ser judía. Ya sé que fueron muchas las víctimas, pero en ese momento sentí dolor por la pérdida de una en concreto y, aunque parezca cruel, para mí fue más intenso que cuando pienso en una masa desconocida.
En fin, que os la recomiendo fervientemente, sobre todo a aquellos que soñais con las palabras.
Para saber más sobre Némirovsky y su obra:

martes, 10 de noviembre de 2009

Mi alter ego en fieltro



Un día mi hermana Lola me regaló una muñeca de fieltro, fue hace tiempo, al poco de publicar mi novela, a mí casi se me había olvidado que la tenía, pero la otra mañana me echó la bronca, y con razón, porque no me la había visto nunca puesta. Así que decidí poner remedio a la situación y me la coloqué en el jersey. Entonces pensé, qué chula que es, le voy a dejar sitio en mi blog, (espero que a mi comentarista anónimo no le moleste). Es redondita y blandita, como yo, jejej... estos últimos meses he engordado un poquito.

Las muñequitas personalizadas las diseña y confecciona artesanalmente la novia de un compañero de trabajo, y se pueden conseguir por internet, ésta es su página, espero que os guste: http://www.micofis.tk/


lunes, 9 de noviembre de 2009

Un pellizco de mi nueva novela

La vi nada más llegar al pueblo. La cabellera roja agitada por el viento inexistente de una mañana sumida en la más absoluta de las calmas, casi aletargada. Un escalofrío recorrió mi espalda como si, en vez de estar contemplando una joven hermosa, ante mí se encontrara el mismísimo diablo. Fue una visión fugaz, la muchacha pronto desapareció tras el edificio del hotel, engullida por la niebla, dejándome confuso y aturdido a un tiempo. Pensé en seguirla, pero me detuve al analizar lo absurdo de la situación. Yo corriendo tras una chiquilla de apenas quince años; no hubiera encontrado una explicación lógica que darle si, al percatarse de que la seguía, me hubiera pedido explicaciones.


Creo que anoche bebí en exceso, no puedo recordarlo con claridad, pero la botella de whisky que esta mañana encontré sobre la alfombra estaba vacía, de eso no hay duda. Mis movimientos lentos y el dolor de cabeza parecen aliarse para demostrar que me estoy pasando con el alcohol. No me importa, lo único que no soporto es la mirada triste de mi madre, cuando se acerca al piso a visitarme con cualquier excusa y tengo la sensación de que en realidad viene a comprobar que aún sigo vivo.
Recorre las habitaciones de mi casa con sus ojos plomizos tratando de evaluar el grosor de la capa de polvo que cubre los muebles, estrujándose las manos, clavando las uñas en las palmas para evitar la tentación de rozar la madera con su dedo índice de ama de casa fracasada. Sabe que no consentiré que limpie nada, que mueva nada, que trastoque ni tan siquiera el más insignificante rincón de mi casa.
Todo permanece en el mismo orden que ella lo dejó, su bolso aún pende de la percha como un trofeo inútil. Mi madre ha reparado en él, desvía la vista y se dirige a la cocina, mira de reojo el cubo de la basura, donde yacen las pruebas vacías de mi vicio recién adquirido. Mi madre se llama Salvadora, de ella heredé el nombre, y se siente impotente ante mi silencio obstinado que llena de vacíos nuestras conversaciones. No, no soporto la mirada derrotada de mi madre, un motivo más para marcharme. Y aquí estoy, en Villa Olvido.
Villa Olvido, curioso nombre para un pueblo, un lugar para los amnésicos o para los que quieren serlo. Aún no sé en qué grupo encuadrarme. Me gustaría olvidar todo lo que ha pasado en estos diez últimos años, ser aquel joven de treinta que buscaba miradas en las que perderse, hasta que encontró la suya, la de la chica de ojos tristes. Villa Olvido, un pueblo de apenas mil habitantes perdido entre montañas, alejado en el tiempo y en el espacio del mundo que yo conocía, el lugar donde esperaba pasar las próximas semanas tratando de descubrir un secreto que me permitiera reconciliarme con ella y conmigo mismo.

viernes, 6 de noviembre de 2009

El lugar desde el que escribo. Sábados Literarios de Mercedes


Esta es mi aportación a los Sábados Literarios de Mercedes, para leer más podeis visitar el blog de Ardilla Roja:http://ardilla-roja.blogspot.com/


Mi pueblo, Alcaudete, está a medio camino entre Granada y Córdoba, rodeado de olivos y al abrigo de una montaña, la Sierra Ahillos. El castillo vigila el pueblo desde arriba, como antes, cuando los peligros se materializaban en hombres armados que pretendían asaltar la villa. Ahora parece protegernos de los males invisibles que nos acechan.

Vivo cerca de un parque lleno de árboles y de niños. Por las tardes juego con mis hijos a recorrer el laberinto de plantas, huimos de las palmeras, atravesamos desiertos, luchamos contra el viento, conseguimos puntos y subimos fases, como en los videojuegos que tanto le gustan. A veces terminamos en la rosaleda, otras entre toboganes y columpios.

Si acercamos la lente, si me buscas tecleando, podrás encontrarme en varios sitios. No soy metódica ni en eso. A veces, como ahora, escribo sentada en el sofá, los pies en alto, tratando de aislarme del ruido de la tele, de los niños, de la calle…

Otras me pongo seria y me voy al despacho, allí dispongo de más sitio y silencio, si descorro las cortinas puedo ver el solar de enfrente y pido un día más que no edifiquen allí, que no me quiten las vistas de la sierra. No, que no construyan nunca en ese solar, que no me roben el sol de la mañana, ni los arcos iris que se forman cuando llueve, a veces son dos. Nacen en los tejados rojos de las casas y mueren en las faldas del monte, acunados por los olivos.

Hoy tengo el día libre


Los niños están en el colegio, mi marido trabajando y yo tengo el día libre, si a eso sumamos que ayer me hice un pequeño esguince en el pie, el resultado es que dispongo de tiempo y disposición para escribir, es decir, aunque tengo otras miles de cosas pendientes (limpiar, visitar a mis padres, comprar, ...) como debo guardar reposo, la actividad más compatible es la escritura. Pues bien, llevo casi una hora con el ordenador encendido y aún no he escrito una palabra, que si miro el correo, que si veo los blogs, que si me paso por el facebook, que si ... Creo que estoy dando vueltas para no ponerme con la novela, son muchos días los que lleva abandonada y ahora me cuesta retomarla.

En fin, voy a intentarlo de nuevo, pondré una música agradable, leeré lo último escrito, que ya lo tengo olvidado e invitaré a las musas a un cafelito, a ver si se animan a visitarme.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Tacones de Azúcar de Yolanda Sáenz de Tejada

Llevo tiempo queriendo hablar de este libro, lo leo, lo releo y no me canso, quizás por eso retraso el comentario en mi blog, para tener la excusa de volver a abrirlo y recordar los poemas que tanto me han gustado.

Quizás el problema es que no sé hablar de poesía, que mis palabras son torpes en esta materia. Supongo que la poesía es buena si consigue conmoverte, atraparte, engancharte, hacer que te olvides del tiempo y del espacio. Si es así, este libro contiene muy buenos poemas.

Tacones de Azúcar se debe degustar despacio, a lametones, deshaciendo cada verso, cada palabra, cada sílaba. Dejándose impregnar por la dulzura del azúcar y por la fuerza de unos tacones que pisan con energía, que piden su sitio, que no se amedrantan.
Mejor me callo y que hablen los poemas por sí mismos, os dejo algunos de los que más me han gustado, la elección ha sido dificil.


No sé
por qué siento
(pura indecencia)
celos de los poemas
que algunos hombres
escriben
a sus mujeres.

No sé
por qué me cuelgo
de la disculpa
un ahogo de
sonrisa torcida,
un amargo deseo
de destrozar
con mis dientes
esas frases.
(No la ames
tanto,
por favor…)

Y termino
cerrando el poema,
dándole un portazo
a las comas
y escupiendo
en los puntos
(y aparte)
que han seguido
escondiéndome
la envidia.

Ahora vengo
aquí,
a este folio
coagulado de mí

(mi yo feo
y oscuro)
para mendigarte
a ti
(to yo blanco de
versos inmaculados)
que me hagas
(por Dios)
un poema
de amor…

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Bienvenido
a mi cuerpo.

Espera en el salón,
por favor.
Estoy aún
fregando mi piel.
Está tan sucia
de recuerdos…

Él se ha ido
hace poco tiempo
y me ha dejado
la foto de boda
entre los pechos.
Abiertos,
cubiertos de escamas
y de quemaduras.
—Tanto fuego en su boca…—

Mira mis piernas…
Están plagadas
de varices y fantasmas
de tanto vagar sus dedos
por ellas.

Tengo aún los arañazos
frescos en los ojos,
—recuerdos vivos
de muchas noches
sin noche—.



:::::::::::::::::

En aquel campo hacía frío
y él era torpe.
Sus dedos siempre tropezaban
con el skay
del R-6 prestado.

En aquel campo hacía frío
y mi lencería no era de Francia,
precisamente,
ni tenía
entre los muslos tibios
una gota
de perfume de Dior.

Pero cada viernes por la noche
mi novio conducía
hasta aquella huerta
de olivos,
aislados como lobos hambrientos
en la tierra.

Llegaba despacio,
y aparcaba el verano en mi pelo.
Siempre sonreía
—con esa boca de azúcar derretida—
cuando le daba voz a aquella canción
que me hacía llorar.
Abdilá del amor infinito

Y lentamente,
bebiéndose después
cada lágrima de mi cuello,
me volcaba el asiento hacia atrás.
Animales aullando en la oscuridad…



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Yolanda Sáenz de Tejada (Huelva 1968) estudió diseño y estilismo y alternó desde muy joven la faceta de diseñadora con la de escritora. Como resultado de su investigación en el campo de la conducta infantil y aplicando el juego como herramienta para conseguir buenos hábitos en los niños, nace su primer libro, ¡A jugar! (Mondadori, 2008, en colaboración con Eduard Estivill), cosechando un gran éxito y siendo traducido a varios idiomas. Acaba de publicar El camino del sueño (Ara Libres, también con Eduard Estivill), una serie de normas para dormir bien.
Es miembro de la Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género.
Actualmente coordina proyectos culturales como "Poesía en Palacio" (un ciclo lírico mensual en la ciudad de Granada) y trabaja como creativa, aunando poesía y arte en sus diseños. Y vive en un lugar cerca del cielo, donde cultiva pimientos y poemas...
De esto último doy fe, pues junto con el libro y una preciosa dedicatoria, recibí un oloroso pimiento.

Más en su blog: http://yolandasaenzdetejada.blogspot.com/

martes, 3 de noviembre de 2009

Roberto Bolaño: Consejos sobre el arte de escribir cuentos


Estoy leyendo una selección de cuentos de Roberto Bolaño y en las primeras páginas me encontré con estos consejos, por aquí los dejo, creo que son interesantes.


Roberto Bolaño

Como ya tengo 44 años, voy a dar algunos consejos sobre el arte de escribir cuentos.

1. Nunca abordes los cuentos de uno en uno. Honestamente, uno puede estar escribiendo el mismo cuento hasta el día de su muerte.

2. Lo mejor es escribir los cuentos de tres en tres, o de cinco en cinco. Si te ves con energía suficiente, escríbelos de nueve en nueve o de quince en quince.

3. Cuidado: la tentación de escribirlos de dos en dos es tan peligrosa como dedicarse a escribirlos de uno en uno, pero lleva en su interior el mismo juego sucio y pegajoso de los espejos amantes. 4. Hay que leer a Quiroga, hay que leer a Felisberto Hernández y hay que leer a Borges. Hay que leer a Rulfo, a Monterroso, a García Márquez. Un cuentista que tenga un poco de aprecio por su obra no leerá jamás a Cela ni a Umbral. Sí que leerá a Cortázar y a Bioy Casares, pero en modo alguno a Cela y a Umbral.

5. Lo repito una vez más por si no ha quedado claro: a Cela y a Umbral, ni en pintura.

6. Un cuentista debe ser valiente. Es triste reconocerlo, pero es así.

7. Los cuentistas suelen jactarse de haber leído a Petrus Borel. De hecho, es notorio que muchos cuentistas intentan imitar a Petrus Borel. Gran error: ¡Deberían imitar a Petrus Borel en el vestir! ¡Pero la verdad es que de Petrus Borel apenas saben nada! ¡Ni de Gautier, ni de Nerval! 8. Bueno: lleguemos a un acuerdo. Lean a Petrus Borel, vístanse como Petrus Borel, pero lean también a Jules Renard y a Marcel Schwob, sobre todo lean a Marcel Schwob y de éste pasen a Alfonso Reyes y de ahí a Borges.

9. La verdad es que con Edgar Allan Poe todos tendríamos de sobra.

10. Piensen en el punto número nueve. Uno debe pensar en el nueve. De ser posible: de rodillas. 11.Libros y autores altamente recomendables: De lo sublime, del Seudo Longino; los sonetos del desdichado y valiente Philip Sidney, cuya biografía escribió Lord Brooke; La antología de Spoon River, de Edgar Lee Masters; Suicidios ejemplares, de Enrique Vila-Matas.

12. Lean estos libros y lean también a Chéjov y a Raymond Carver, uno de los dos es el mejor cuentista que ha dado este siglo.


lunes, 2 de noviembre de 2009

Parece ser que canso


Hoy me han hecho un comentario sobre mi blog, parece ser que alguien se cansa con las historias de mi vida y me dice que no viene por aquí porque está harto de que haya convertido esta página en un desahogo para mis problemas o en un lugar donde compartir las gracias de mis niños. Me parece bien que critique lo aquí publicado, es un riesgo que se corre cuando inicias un blog. Lo que me gusta menos es que lo haga de forma anónima, espero que haya elegido el anonimato porque se trate de una persona que no conozco y lo de menos sea el nombre.

Es cierto que ultimamente publico muchas cosas sobre mi vida, pero este blog, en parte nació para eso, para suplir mi memoria. Otro de los motivos de crearlo fue divulgar mis escritos, mis premios, mis ilusiones, pero también mis fracasos porque todo ello conforma mi experiencia como escritora novata. Y eso es lo que intento.

Agradezco todas las visitas y comentarios, incluso los del amigo anónimo, pero no obligo a nadie a venir por aquí, la puerta está abierta para entrar y también para salir.
Vaya, ya me salió otro post sobre "Mis cosas", si es que se me va la mano... Y para más inri ilustro la entrada con una foto de mis niños de hace unos añitos.