Anotó la fecha del último señalamiento y cerró la agenda. Levantó el pisapapeles con forma de cubo y cogió un sobre marrón. Sacó la foto de aquella mujer de ojos oscuros, que le miraban sin prisas, con la calma que imprime la muerte. Quizás ella sabía que iba a morir cuando le hicieron aquella instantánea. Hay gente muy perceptiva. No se sentía orgulloso por defender a su asesino, pero no quería dejarse amedrentar por la mirada acusadora que se había quedado impresa para siempre en aquella fotografía. Él no era un mago, no podía devolverle la vida ni recomponer los pedazos de su cuerpo. Por eso no se sintió culpable cuando consiguió la absolución de aquel hombre. Sólo persistía un pequeño problema, a pesar del tiempo transcurrido, más de seis meses; aún no había podido romper el sobre y arrojarlo a la papelera. Quizás cuando regresara de Europa…
(Relato seleccionado en el mes de enero en el Certamen Microrrelatos sobre abogados, eso para que no me queje, lo digo por mi anterior entrada)
15 comentarios:
Un relato nos revela lo duro de algunas profesiones. Yo creo que no podría ser abogado, y mucho menos juez. Eso de ir defendiendo a verdugos o dictar sentecias... me parece un don de dioses.
Besos.
Pues si, eso es para que no te quejes jajaja
Muy buen micro, Felisa.
Besos
Perdona, me da verguenza decírtelo pero, es amedrentar, perdona de nuevo.
Un beso
El relato está muy bien, Felisa. Lo que le pasa a tu personaje es lo que le tiene que pasar a miles de abogados pero, es su profesión.
Un beso.
Gracias Mercedes, ARdilla y Paco por vuestros comentarios.
Y también quiero dar las gracias a ese anónimo por señalarme la falta, a veces nos fiamos del corrector del word y nos juega malas pasadas. Por supuesto que es amedrentar, ya lo he cambiado.
Un abrazo para todos.
Hace unos años cuando comencé a estudiar en la universidad mi carrera era Derecho, luego de tres años de estudio y ver como todo se desenvolvia y entender que la justicia nunca es ciega, decidí abandonarlo todo y dejar esa plaza a alguien que de verdad pueda vivir con eso, que justamente siente tu personaje.
Un relato que me ha parecido excelente. Y mira hasta salio premiado y te sube el ánimo para seguirnos escribiendo.
Un beso
Yo hago lo contrario que los abogados, es decir, buscar a delincuentes y entregarlos a la Justicia. No podría defenderlos aun sabiendo que son culpables.
Un beso.
Enhorabuena. Buen relato.
¡Felicidades, Felisa! Muy bonito micro, me encanta. Yo decidí dejar el concurso, pero he disfrutado mucho cada mes con este reto.
Suerte en la decisión final.
Un abrazo.
Enhorabuena. Tienes motivos para estar contenta. Espero que te haya subido un poquito los ánimos.
Un abrazo
¡Felisa! Acabo de volver de viaje y me encuentro con la buena noticia de la selección de tu micro en el certamen de abogados. ¡Qué bien!
Enhorabuena, guapa.
Enhorabuena Felisa!!!!!
Un gran microrelato.
Mucho contenido en pocas palabras.
Eso nos alenta a todos a seguir en la brecha.
Un gran beso, amiga.
Gracias por vuestros comentarios, siempre me dan ánimos para seguir escribiendo. Un abrazo
¡Enhorabuena, Felisa! Buen relato y merecido galardón. A ver si con este te van volviendo las ganas.
Un beso.
Felisa no sé de qué van las quejas, pues soy más despistada que un pulpo en el metro ;=) pero el micro es muy bueno, dices mucho en apenas unas líneas de nada...
¡Enhorabuenaaaa otra vez y por doble partida ;=))!!
Un besote.
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